domingo, 31 de agosto de 2014

La entrada del txoko.

Continuando el corta pega de mi blog, ahora os voy a enseñar otra labor realizada en el Palacete. En las casa viejas siempre hay sorpresas. Unas te las esperas, otras son inesperadas. Esta es de las primeras, estaba seguro que tenia que pasar, asi que le pase los trastos de matar a mi esposa, y me descubrio algunos puntos "delicados".
Por cierto, me he acordado mucho este verano de Martin Olivas, el carpintero. Algunos os acordareis de lo "mucho" que me gustaba el marron chocolate que usaba en sus muebles. El jodido color es dificilisimo de quitar, y ya vereis la cantidad de marron chocolate que me he encontrado.
Sin mas os dejo con el tema.


Hola a todos.
En el proceso de saneamiento de las paredes, y en colaboración estrecha con el departamento de mantenimiento del hogar (mi señora esposa), hemos dado comienzo a la reparación de la entrada del txoko. El primer paso es localizar la mayor cantidad de desperfectos posibles, así que con la alcotana en la mano, mi señora esposa comenzo a "derribar" todo lo que se movía en esa zona. Al final del proceso de revisión el resultado es el siguiente


Pero el otro lado de la pared tampoco es que este bien, pero como es de hormigón de los de antes, no tiene nada que tirar, si acaso lucirlo un poco.









Poco a poco se va poniendo yeso para darle mejor acabado, y una superficie buena donde pintar. Parece que al final le estoy cogiendo el callo a la llana. Y en justa correspondencia, la llana me esta regalando un total de cuatro callos, hasta el día de hoy.








Como se puede ver en la primera imagen, en la parte inferior se ven dos ladrillos. Por ellos se nota una ligera corriente de aire, y como en un par de días se ve que se han secado mucho, hemos decidido dejarlos al aire, poniendo una rejilla, para evacuar en lo posible la humedad que hay en la pared.





En las fotos no se nota, pero la pared pequeña de la derecha (mirando la foto), no es un paño recto, sino que esta revocado haciendo una especie de circulo. Es algo muy típico en las casa de esta zona, donde no encuentras una esquina que no este redondeada en las casa antiguas.
Pues a fuerza de paciencia he conseguido hacer una esquina en condiciones, haciendo que la pared tenga un ángulo en el centro, quedando una linea recta (o casi) justo al lado de la rejilla. Otra cosa que he aprendido.




La puerta a estas alturas del verano ya esta lijada. Me costo mucho lijarla, y no se si es por el color que tenia (marrón chocolate), pero creo que ha ganado mucho.
Y por el momento es todo, espero poder poner otro tema proximamente.

4 comentarios:

  1. Va muy bien ,a puerta podes aclararla y emparejar el color si conseguís, porque la verdad no se si allí tienen, aquí es de uso comun , sal de limón disuelta en agua aplicada al sol y dejarla un par de horas, te queda nueva y luego le das el protector embellecedor que quieras. Ojalá te sirva el dato.
    Abrazo

    Fernando

    ResponderEliminar
  2. Gracias por el consejo ¨Fer. Lo voy a probar, pero no con la puerta, porque la he barnizado, y esta quedando bastante igualada con la mesa y el resto de elementos de madera del txoko. Pero el truco es de los de guardar para usar.
    Gracias por tus palabras palabras, y por los animos que me das.

    ResponderEliminar
  3. Es una cruzada la que estás emprendiendo, otros ya hubieran tirado las lanzas y escudos ante tremendo reto. Saludos y ánimo, vamos adelante.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. No me lo he planteado, porque como ha sido un mes entero, todos los dias (menos un par de ellos, por visitas de familiares) mañana y tarde, que no me ha dado tiempo a rajarme. Ya veremos este mes, que solo puedo hacer fines de semana, que es lo que pasa.

      Eliminar